Esteban Bullrich: “Me quiero presentar como candidato a presidente en 2027”

El exsenador nacional, que padece ELA, sostuvo que su principal motivación es promover la unidad nacional y que su campaña se centraría en “mi alma hablándole al alma de los argentinos”.

Política02 de diciembre de 2025Sección PaísSección País
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El exsenador nacional Esteban Bullrich reveló sus aspiraciones políticas y aseguró que se quiere presentar como candidato a presidente en 2027. En una entrevista con LN+, el exfuncionario, quien padece Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), sostuvo que su objetivo es "unir a los argentinos" y dejar un legado positivo.

Bullrich explicó que renunció a su banca en la Cámara alta "a los honores pero no a la lucha", y que su compromiso es "dejar un mejor país" para sus hijos. A pesar de su clara intención, aclaró que la decisión final dependerá de su familia: “Obvio que María Eugenia (Sequeiros) y mis hijos tienen la última palabra, pero yo me quiero presentar”.

El rol de la enfermedad en su visión política

El exsenador, cuya capacidad de movimiento está restringida a sus ojos, explicó que esta condición le da un significado especial a una eventual campaña:

“Los ojos son la puerta del alma. Por eso, la campaña sería mi alma hablándole al alma de los argentinos”, explicó Bullrich, afirmando que sus intenciones están motivadas por la misión que siente que encontró en su vida.
Al reflexionar sobre el liderazgo, Bullrich citó un pasaje de su libro inédito, Liderazgo espiritual, para definir el tipo de conducción que necesita el país: “La Argentina no necesita héroes de bronce... La Argentina necesita almas grandes, hombres y mujeres que acepten la humildad como cimiento, el diálogo como método... y la reconciliación como horizonte”.

Análisis de la provincia de Buenos Aires

En otro ámbito, Bullrich presentó el libro Una Nueva Buenos Aires, escrito junto a Jorge Colina y Enrique Morad, donde analiza las profundas desigualdades de la provincia que recorrió en su campaña de 2017.

El exsenador describió a Buenos Aires como un "territorio partido en dos" donde:

  • Conurbano: La pobreza "se volvió paisaje" y la inseguridad es una experiencia cotidiana, con "pandillas que ocupan el lugar que el Estado abandonó".
  • Interior: Pueblos que han "perdido trenes, fábricas, oportunidades", donde la soledad se siente como una forma silenciosa de inseguridad.

Denunció una desigualdad "existencial" que se manifiesta al cruzar una ruta, pasando de barrios con servicios básicos a otros sin agua potable ni un horizonte claro, limitando el futuro de los niños por su geografía.

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