La central obrera definió la medida de fuerza tras el envío del proyecto de Javier Milei al Congreso. La movilización coincidirá con la protesta de la izquierda. Los gremios denunciaron falta de diálogo y adelantaron que pedirán la inconstitucionalidad de la norma en la Justicia.
Política11 de diciembre de 2025
Sección País
La Confederación General del Trabajo (CGT) resolvió endurecer su postura frente al Gobierno y convocó a una marcha a Plaza de Mayo para el próximo jueves 18 de diciembre. La medida de fuerza tiene como objetivo principal expresar el rechazo unánime de la central obrera al proyecto de reforma laboral que el presidente Javier Milei firmó en las últimas horas para su tratamiento en sesiones extraordinarias.
La decisión fue tomada este mediodía durante una reunión del Consejo Directivo en la histórica sede de la calle Azopardo. Si bien en un principio los dirigentes sindicales habían apostado por una estrategia "institucional" de diálogo con legisladores, la confirmación del envío de la ley al Senado precipitó el cambio de rumbo hacia la acción directa. La movilización coincidirá, además, con la protesta anunciada por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), cuyo referente Nicolás del Caño llamó a ganar "las calles" contra una iniciativa que calificó de "esclavista".
El encuentro en San Telmo estuvo encabezado por los dirigentes Jorge Sola, Cristian Jerónimo y Octavio Argüello. Al finalizar, la cúpula gremial cuestionó duramente que el Ejecutivo haya avanzado con el texto sin habilitar una "mesa de diálogo" tripartita que incluyera al sector empleador y a los representantes de los trabajadores.
En conferencia de prensa, Jorge Sola fue categórico: la central "se opone terminantemente a cada uno de los puntos" de la reforma. Según el portavoz, la iniciativa oficial "transita por la precarización laboral" y representa un retroceso hacia la informalidad. En ese sentido, anticipó que la marcha del jueves próximo será "contundente".
El "plan de acción" diseñado por la CGT tiene dos frentes simultáneos. En el plano político, los sindicalistas intensificarán el lobby con gobernadores y legisladores para "explicar por qué no puede salir esta ley", reclamando estar presentes en el debate de comisiones para discutir "punto por punto" un proyecto que, denuncian, se trata "entre gallos y medianoche".
En el plano legal, la estrategia será la judicialización de la norma. Sola confirmó que impulsarán acciones ante los tribunales para que se declare la "inconstitucionalidad" de varios artículos del proyecto libertario, en caso de que este sea aprobado por el Congreso.
Como antesala a la definición de la protesta, la dirigencia cegetista ya había comenzado a tejer alianzas políticas. En la víspera, mantuvieron un encuentro clave con el bloque de senadores peronistas, quienes se comprometieron a rechazar la reforma. Esa reunión, realizada en el despacho de José Mayans, contó con la presencia de figuras como Mariano Recalde, Alicia Kirchner, Jorge Capitanich y Martín Soria, además de diputados de extracción sindical como Vanesa Siley y Hugo Yasky.
Estará al frente del cuerpo por quinto mandato consecutivo durante el período 2026-2027. La jueza Alicia Ruiz fue confirmada en la vicepresidencia. Ambas cuentan con una extensa trayectoria judicial.
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