En plena pelea por el derecho a huelga, la CGT lanza su canal de streaming

En medio del conflicto con el Gobierno por el nuevo decreto que limita el derecho a huelga, la CGT sorprendió con un movimiento inesperado: lanza su propio canal de streaming. Se llamará Azopardo Stream —como la calle donde está la sede histórica del sindicalismo— y estará al aire desde este jueves a las 19.

El anuncio llegó con un spot en redes sociales que toma prestada la estética de El Eternauta, la serie más vista de Netflix en Argentina. “Algo nuevo está llegando”, dice el tuit que acompaña al video. Y remata con una frase que también busca marcar época: “Nadie se salva solo.”

Trajes, calle y relato digital

El video muestra a tres personas dentro de una oficina en la CGT. Una propone: “No podemos seguir encerrados, tenemos que salir”. Acto seguido, se visten con trajes tipo Eternauta y salen a la calle. “Che, me parece que flasheamos con estos trajes”, dice una. “El mundo ya no es lo que era”, responde otro.

La escena finaliza con una radio encendida que lanza el mensaje central: “La resistencia tiene frecuencia. Sintonizá. Difundí. Nadie se salva solo".

Tribunales y plataforma propia

El canal llega apenas horas después de que la CGT presentara una acción de amparo colectivo contra el decreto presidencial 340/2025, que amplía el listado de actividades esenciales y establece que en caso de conflicto deben garantizarse entre el 50% y 75% de los servicios.

Para la central, se trata de “un ataque directo al derecho de huelga” y de una medida “inconstitucional”. La demanda fue presentada ante el Juzgado Nacional del Trabajo N°3, a cargo de la jueza Moira Fullana, por un equipo legal que integran Federico West Ocampo (Sanidad), Hugo Moyano (h.) y Marta Pujadas (Uocra).

No es la primera vez que la CGT frena un DNU en Tribunales: ya lo había hecho en 2023 con el DNU 70/23. Pero esta vez suma una estrategia paralela: disputar la conversación pública también desde las redes.

El sindicalismo argentino —acostumbrado a los pasillos del poder— ahora también se mete en el streaming. Nadie sabe qué tan lejos va a llegar. Pero eligió no quedarse mirando.