Un Congreso protagonista le complica los planes a Milei

Desde la frontera donde una semana se despide y otra llega, podemos decir que el Congreso se mantiene como protagonista excluyente de la agenda política.

Si bien la Cámara de Diputados le dio el gusto a Javier Milei y sostuvo el veto a la ley de movilidad jubilatoria impulsada por la oposición, todo lo que llegó después desde el Palacio Legislativo –más precisamente desde el Senado– fueron pálidas para el presidente.

En un hecho inédito, la Cámara alta se sumó al rechazo pronunciado por Diputados respecto al DNU que le asignaba $100 mil millones a la SIDE con destino “reservado”. Nunca había pasado que ambas cámaras rechazaran un DNU del Poder Ejecutivo.

¿Qué pasa ahora con estos fondos?

Según Andrés Gil Domínguez, abogado y profesor titular de Derecho Constitucional en la Universidad de Buenos Aires (UBA), al ser rechazado por ambas cámaras el DNU es “nulo de nulidad absoluta”, lo que implica que “la SIDE nunca tuvo una ampliación presupuestaria y que dichos fondos nunca fueron reservados, consecuentemente, no los puede ejecutar y dejan de ser reservados transformándose en públicos”.

 “Los fondos no ejecutados dejan de estar asignados a la SIDE, los ejecutados dejan de ser reservados y cualquier persona ejerciendo el derecho de acceso a la información pública puede conocer cómo se aplicaron”. Sobre los “derechos adquiridos” que menciona el artículo 24 de la ley que regula los DNU, señaló: “En el caso del DNU 656/2024, esta norma no se aplica por cuanto la SIDE como órgano del Estado no es un sujeto susceptible de adquirir derechos”, agregó.

Veremos...

Como dijimos antes, no fue el rechazo a los fondos reservados de la SIDE el único revés que recibió el Gobierno por parte del Congreso. También se aprobó la ley de Financiamiento Universitario, cuyo “veto total” ya fue confirmado por el propio Milei a través de un reposteo en su cuenta de X.

¿Podrá sostenerlo esta vez? El contexto parece ser distinto al del miércoles, cuando la Rosada logró dividir a la oposición y así mantener el rechazo a la recomposición de haberes para los jubilados. Los votos a favor de la ley de financiamiento universitario, que tiene un impacto fiscal del 0,14% del PBI, fueron 57.

Al menos 9 senadores deberían cambiar de posición. ¿Los dos senadores del PRO que votaron a favor volverán a darse vuelta, como con los jubilados? Uno fue Luis Juez, quien mantiene una relación oscilante con la Casa Rosada. La otra fue Guadalupe Tagliaferri, quien reporta a Horacio Rodríguez Larreta.

El exjefe de Gobierno porteño, quien viene tejiendo un espacio de centro “desarrollista” junto a otros dirigentes del PRO desencantados con el rumbo que Mauricio Macri le ha impreso a su partido, fue muy claro en su posición. “Desfinanciar las universidades es desfinanciar el futuro de millones de jóvenes. Sin educación no hay desarrollo ni igualdad de oportunidades”, sentenció desde su cuenta de X.

¿Y la que se abstuvo? Se llama Victoria Huala y es de La Pampa. Suponiendo que ella cediera a las presiones del oficialismo, a La Libertad Avanza le faltarían 9 votos. Cambio Federal, el espacio que lidera Juan Carlos Romero, aportó 4 votos afirmativos a la iniciativa. El misionerismo de Carlos Rovira, que cada tanto le tira un beso de lejos al Presidente, dos. Y las senadoras Mónica Silva, de Río Negro, y Beatriz Ávila, de Tucumán, son las otras dos a las que el oficialismo podría apuntar. Pero siendo tan finita la cuestión, resulta difícil pensar en que todos ellos pudieran arriesgarse a quedar envueltos en un verdadero escándalo.

Sobre todo, teniendo en cuenta que los gremios ya anticiparon una movilización en rechazo del veto. Y que, justamente, la única bala que parece haberle entrado a Milei desde que es presidente fue la de la marcha universitaria concretada el pasado 23 de abril. Incluso, a pesar del intento K de apropiarse de esa bandera.

Así las cosas, lo único que le quedó para festejar al Presidente esta semana fue la aprobación –a medias– de la Boleta Única de Papel. Iniciativa a la que, como el Senado le introdujo cambios, volverá a ser tratada por Diputados para resolver su destino final. Su aprobación debe resolverse antes de marzo de 2025, para que no pierda estado parlamentario.

¿La inflación? Quedó lejos del 3,9% que esperaban Milei y “Toto”, el rockstar de los numerazos. Y aún más lejos de los optimistas que la veían en 3,5%. Según el INDEC, en agosto el IPC registró una suba de 4%. Un 0,2% más que en julio, empujado fundamentalmente por los aumentos de tarifas. Inesperado, dijo nadie nunca.

Así las cosas, la línea de pobreza para un adulto que no alquila quedó establecida en $304.170,00. La jubilación mínima –con bono– hoy es de $295.454,42.

Sin embargo, este dato no privará al presidente Milei de recibir con asado, el martes, en Olivos, a los “87 héroes” que le negaron a nuestros adultos mayores una recomposición de $13.000,00. ¿Qué se puede comprar con eso hoy? Casi 10 sachet de leche.

Pero antes de esa cita, el libertario hablará en cadena nacional desde el Congreso, adonde este domingo irá a “defender” la ley de Presupuesto 2025. El kirchnerismo ya avisó que no piensa ir a escucharlo, y en la oposición dialoguista habría asistencia parcial. Muchos de esos legisladores están hartos de sus maltratos.

Hasta el momento, la única que parece estar dispuesta a confrontar con él es Cristina Kirchner. Un win-win para ambos, ya que a ella le permite mantener con vida a esa iglesia en la que se convirtió el kirchnerismo, y a él ningunear a Macri, quien empezó a hacerle sentir el rigor de su poder de fuego pese a querer “ayudar”.

Desde Merlo, donde dio una “clase magistral” sobre economía solidaria, Cristina respondió a la clase de economía “ad honorem” que Milei le ofreció el viernes pasado, luego de que ella publicara un documento sobre economía bimonetaria. Además de reversionar sus greatest hits, la expresidenta le pidió a Milei que “largue a Milton Friedman, largue la escuela austríaca, cace el manual argentino” y se siente “a administrar". También le reprochó su silencio sobre casos de conmoción pública, como la desaparición de Loan Peña y la detención del exlegislador misionero Germán Kiczka, acusado de pedofilia.

Pero no todas fueron espinas para el Presidente: Cristina también le reconoció haber logrado que corrieran al chileno Rodrigo Valdés, jefe de Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, de las negociaciones con la Argentina. Según confesó, le hubiera “gustado” que “otros” hubieran tenido “ese empeño”.

¿Teléfono para Massa? El tiempo dirá…