
El FMI aprobó un nuevo acuerdo con Argentina por USD 20.000 millones
El plan contempla un desembolso de USD 15.000 millones en 2025 y marca el inicio de la “Fase 3” del programa económico de Javier Milei.
En el marco de la reestructuración de la ex AFIP, la Dirección General Impositiva (DGI) aceleró la investigación sobre Tabacalera Sarandí, la empresa de Pablo Otero, mejor conocido como el "Rey del Tabaco". El caso, que atraviesa instancias judiciales, involucra una supuesta evasión fiscal de aproximadamente $200.000 millones entre 2018 y mediados de 2024, equivalente a cerca de USD 1300 millones según cotizaciones promedio.
Para robustecer la investigación, la nueva administración de la DGI desplazó a cuatro funcionarios clave y nombró a especialistas de confianza en áreas críticas de control fiscal. Este enfoque busca fortalecer dos grandes frentes: el monitoreo de impuestos internos y la fiscalización tributaria del sector tabacalero. Entre las medidas más significativas destaca la reformulación del sistema de control de estampillas fiscales.
Tabacalera Sarandí, conocida por su marca "Red Point" y un volumen de ventas de 40 millones de atados mensuales, enfrenta acusaciones de subdeclaración de ingresos y evasión del impuesto interno, que grava el 73% sobre el precio de venta al consumidor. Según las autoridades, esta práctica le permitió a la empresa ganar una cuota significativa del mercado al ofrecer productos a precios muy inferiores a los de sus competidores.
La deuda de Sarandí incluye omisiones tributarias y amparos judiciales que cuestionan la constitucionalidad del régimen impositivo. Para la DGI se trata de un caso prioritario, no por el monto involucrado sino por por la necesidad de “reducir la indisciplina fiscal en el sector”. Desde el organismo afirman que "se acabó la fiesta" para los evasores y subrayan que estas medidas buscan restaurar la equidad del sistema impositivo.
El plan contempla un desembolso de USD 15.000 millones en 2025 y marca el inicio de la “Fase 3” del programa económico de Javier Milei.
El dólar oficial podrá moverse entre $1.000 y $1.400 con una banda móvil que se ajustará 1% por mes. También se elimina el blend y se flexibiliza el acceso a divisas.
Lo dijo al anunciar la renovación del swap con China y alimentó rumores de un inminente cambio de régimen tras el acuerdo con el FMI.
El dato fue más alto que el esperado y alimenta el recálculo del mercado. El Gobierno ya había prometido que no habría volantazos con el dólar, pero el acuerdo con el FMI obliga a repensar todo.
El dólar oficial podrá moverse entre $1.000 y $1.400 con una banda móvil que se ajustará 1% por mes. También se elimina el blend y se flexibiliza el acceso a divisas.