Duro golpe para Marra: no logró renovar su banca y quedó aislado del universo libertario

Ramiro Marra fue uno de los grandes derrotados de las elecciones legislativas en la Ciudad de Buenos Aires. Pese a sus intentos de mostrarse como una opción libertaria alternativa, no sólo quedó sexto con apenas el 2,6% de los votos, sino que no logró alcanzar el piso del 3% necesario para renovar su banca en la Legislatura porteña.

El legislador porteño se presentó con el sello de la UCeDé, tras haber sido desplazado de La Libertad Avanza por decisión directa de Karina Milei. Con el 99% de las mesas escrutadas, Marra sumó apenas 43 mil votos y quedó por debajo incluso de la candidata del Frente de Izquierda, Vanina Biasi, que sí logró ingresar con un 3,16%.

La derrota lo dejó afuera del recinto desde el 10 de diciembre y sin chances concretas de recuperar espacio dentro del armado libertario. A pesar del resultado, Marra celebró la victoria de Manuel Adorni: “Este es un triunfo para aquellos que queremos una Ciudad con más libertad y orden”, escribió en X.

Intentó reinsertarse en el esquema oficial al afirmar que “hay que dejar de profundizar las pequeñas diferencias y construir sobre las similitudes de cara a 2027”, pero las puertas del espacio conducido por Karina Milei parecen definitivamente cerradas. La secretaria General de la Presidencia fue quien lo desplazó de la jefatura del bloque en 2023 y luego avaló su expulsión.

En el tramo final de la campaña, Marra buscó llamar la atención con una jugada polémica: anunció que sortearía 10 mil dólares, el equivalente a lo que tenía previsto gastar en su búnker. No alcanzó. El resultado dejó en claro su aislamiento político y una caída pronunciada en su volumen electoral, a diferencia de Adorni, que superó el 30% y consolidó el control de LLA sobre el electorado de derecha en la Ciudad.