Anticipo: el Gobierno cambia la cúpula del Servicio Penitenciario

Política 11 de marzo de 2024 Camilo Cagnacci Camilo Cagnacci
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La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, tiene previsto desplazar al director nacional del Servicio Penitenciario Federal (SPF), José Velarde, y designar en su reemplazo a Fernando Martínez.

Martinez no es un novato en la materia: fue parte del Servicio Penitenciario Federal entre enero de 1989 y mayo de 2020, cuando el expresidente Alberto Fernández lo intervino por los supuestos lazos entre agentes del SPF y la banda de "cuentapropistas" de la AFI macrista que entonces investigaba el juez federal Federico Villena por tareas de espionaje ilegal.

Cabe recordar que, más de tres años después, el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi –actual instructor del expediente– decidió sobreseer a los penintenciarios investigados y anular ese capítulo de la causa.

El cambio de jefe en el Servicio llega en medio de la ola de violencia narco en Rosario, donde hoy Bullrich anunció que pedirá que se aplique la ley antiterrorista a quienes cometan hechos de violencia para generar miedo. Y cuatro meses después de la fuga de Mauricio "Caníbal" Laferrara, jefe de sicarios del capo narco Esteban Lindor Alvarado que permanecía alojado en Devoto bajo un régimen "más laxo" que el de sus "colegas" de alto perfil.

Éste último episodio, al que luego se le sumaron otras fugas misteriosas, se produjo el 20 de octubre pasado, apenas 14 días después de la designación de Velarde como director nacional del SPF.

"Se las están cobrando", resumió sobre el inminente desplazamiento de Velarde una fuente penitenciaria consultada por Sección País.

Como sea, Martínez no estará solo en la tarea de reemplazar a Velarde. Su segundo será Diego Morel, quien en septiembre pasado fue noticia luego de que delincuentes balearan la casa de sus padres y le dejaran un mensaje intimidatorio al estilo de los narcos rosarinos. En él se detallaban los nombres de sus sobrinos que, casualidad o no, quienes hayan sido los responsables del mensaje, sabían que estos residían en la vivienda atacada.

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