El último acto de Batakis

La saliente ministra de Economía viajó a Santa Cruz para firmar una ampliación del contrato de construcción de las represas “Néstor Kirchner” y “Carlos Cepernic”. Las obras son financiadas China.

03 de agosto de 2022 Sección País Sección País
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En su último día como ministra de Economía, Silvina Batakis firmó ayer la ampliación del contrato de construcción de las represas Néstor Kirchner y Carlos Cepernic en Santa Cruz por US$300 millones que vendrán de China.

Ambas represas forman parte de los más ambicioso proyectos energéticos que tiene la Argentina en la actualidad. Fueron licitadas en 2013, pero distintos factores políticos y económicos retrasaron la obra. 

Así lo reconoció el propio secretario de Estado en la Coordinación Provincial de Aprovechamientos Hidroeléctricos del Río Santa Cruz, Daniel Copertari, quien dijo que "se está en un 27% de avance".

En ese contexto, Batakis voló ayer a Santa Cruz  –por orden de Alberto Fernández– y firmó con la gobernadora Alicia Kirchner la ampliación del contrato para que los trabajos se reanuden.

Ese contrato, con sus nuevas enmiendas, pasó de US$4700 millones a un poco más US$5000 millones. Esos US$300 millones se utilizarían para evitar que un nuevo deslizamiento de tierra afecte -otra vez- a las represas.

La ejecución del proyecto, que tiene como objetivo la generación de 1310 MW de energía limpia, está a cargo de Represas Patagonia, una UTE conformada por Gezhouba Group Corporation, Eling Energía SA e Hidrocuyo.

Desde su inicio se estableció que la construcción sería completamente financiada por bancos chinos, con un repago que se realizaría a partir de la finalización con la generación de energía.

El contrato de crédito se firmó entre la Argentina y los bancos China Development Bank, Industrial and Commercial Bank of China Limited y Bank of China Limited. La licitación final de la obra se hizo en 2014 por US$4100 millones.

Pero lo cierto es que en los últimos años el desembolso de dinero prácticamente no llegó y fue el Tesoro nacional quien inyectó liquidez para que la obra no se detuviera por completo.

Desde el Palacio de Hacienda apuntaban contra Gustavo Beliz, ahora exsecretario de Asuntos Estratégicos, por frenar el giro de dólares. Él siempre lo negó.

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