
Mientras espera el dato de inflación de agosto, el oficialismo busca contener la interna, enfrenta citaciones en el Congreso y suma reclamos de la UBA, los gobernadores y hasta de los rusos.
El vocero presidencial y candidato libertario cruzó al macrismo porteño, elogió con reservas a Santoro y defendió el rumbo económico pese a la volatilidad.
Política07 de abril de 2025Manuel Adorni se calzó el traje de candidato y pateó el tablero político porteño. En una entrevista con LN+, el vocero presidencial —que encabezará la lista de legisladores por La Libertad Avanza en la Ciudad de Buenos Aires— marcó distancia del PRO, elogió a Leandro Santoro con un palito incluido, y defendió el modelo libertario pese a la turbulencia financiera de los últimos días.
“El PRO está en proceso de desintegración”, afirmó Adorni, al argumentar que Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta ya no integran el partido y que Mauricio Macri “no participa de la elección”. “Perdieron la identidad. Son procesos políticos, no mucho más”, resumió.
Consultado por la decisión de competir separados el 18 de mayo, Adorni explicó: “Con ellos hemos trabajado muy bien a nivel nacional. Pero en la Ciudad no compartimos agenda. No vamos a hacer alianzas en ningún distrito para ganar elecciones. De ninguna manera”.
Adorni sorprendió al elogiar a su rival de Unión por la Patria, Leandro Santoro. “Es un buen candidato, que defiende ideas horrendas”, dijo. Aunque no se privó de responderle cuando le achacaron al oficialismo disfrutar de “humillar a los demás”: “Somos hiperrespetuosos. Tenemos excelente relación con periodistas”, aseguró.
También se refirió a la crisis en los mercados por los aranceles anunciados por Donald Trump. Según Adorni, el Gobierno ya preveía escenarios de volatilidad externa. “Si esto pasaba en otros gobiernos, estarían cerca de reventar por los aires. Nosotros tenemos superávit fiscal, cuentas ordenadas y un acuerdo con el FMI a punto caramelo”, dijo.
Sobre el riesgo país, minimizó la suba: “No implica modificar el programa económico. Si fuera permanente, se combate con más ortodoxia, ajuste fiscal y más apuesta a lo que tenés. Eso sacó a la Argentina del infierno”.
Además, disparó contra los “tirapiedras mediáticos” que “plantean un futuro catastrófico porque no tienen manera de llegar por el voto, por su pasado, o porque las cosas salen bien”.
Adorni también cuestionó el rechazo del Senado a los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla: “En ningún país republicano con reglas claras te rebotan a un juez por razones políticas. Bueno, en Argentina pasa. Y tenemos que convivir con eso”.
Con tono de campaña, libreto libertario y munición gruesa, Adorni le dio el puntapié inicial a su carrera porteña. Y dejó claro que irá al choque con todos. Especialmente, con sus exsocios.
Mientras espera el dato de inflación de agosto, el oficialismo busca contener la interna, enfrenta citaciones en el Congreso y suma reclamos de la UBA, los gobernadores y hasta de los rusos.
La política arde. De las presuntas coimas en la ANDIS a la investigación por el caso $LIBRA, la Justicia pone contra las cuerdas al Gobierno. Mientras, los vetos de Milei calientan la calle y las internas recrudecen.
El mandatario anunciará el plan 2026 en cadena nacional tras tomarle juramento a Catalán. El Congreso se prepara para una ofensiva contra los vetos y la economía muestra nuevos signos de deterioro.