Atentado a CFK: Axel Kicillof reclamó "conocer la verdad"

A dos años del atentado contra Cristina Kirchner, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se refirió este domingo a “una causa que sigue impune porque el Poder Judicial evitó todo intento de buscar a quienes financiaron e impulsaron el hecho”. Asimismo, junto al hashtag #2AñosDeImpunidad, expresó: “Los argentinos necesitamos conocer la verdad y reclamamos justicia”.

Militantes kirchneristas y organizaciones se manifestaron con el mismo tono. “En la Argentina existe un pacto de impunidad que encubre a los autores intelectuales y financiadores del intento de asesinato a Cristina. Los argentinos y argentinas necesitamos conocer la verdad y reclamamos justicia”, escribió Eduardo “Wado” de Pedro en su cuenta de X.

La Cámpora hizo lo propio con un video que repasa las críticas de varios dirigentes contra la expresidenta con imágenes de archivo, discursos y marchas, al que titularon: “¿Quién mandó a matar a Cristina?”. El mismo material fue compartido por el intendente de Hurlingham, Damián Selci, y por el exsecretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti. “Hoy se cumplen #2AñosDeImpunidad”, remarcaron.

El juicio

El pasado 14 de agosto, Cristina Kirchner declaró como testigo ante los jueces Tribunal Oral Federal N° 6, Sabrina Namer, Adrián Grunberg e Ignacio Fornari. “Faltan los autores ideológicos, los financiadores. El partido judicial sigue protegiendo a los ideólogos, no a los financiadores. Más que un reclamo mío es una deuda que se debe saldar con la democracia”, denunció la expresidenta.

Sobre ese punto, subrayó que el diputado bullrichista Gerardo Milman fue escuchado en el bar Casablanca, ubicado frente al Congreso: “Cuando la maten, voy a estar camino a la Costa”. Calificó a Milman de “nostradamus contemporáneo” e insistió: “Los celulares de sus secretarias fueron borrados por el director de tecnología informativa del Ministerio de Seguridad que encabeza Patricia Bullrich. Todo tiene que ver con todo”.

La última declaración en el juicio por el ataque fue la de Diego Carbone, quien tenía a cargo el departamento de la Policía del que dependía la custodia de la expresidenta el día del atentado. Sostuvo que todo sistema de seguridad es falible y se escudó: “En Estados Unidos mataron a cuatro presidentes y hubo dos heridos, con toda la seguridad que tienen”.

El custodio fue consultado por qué marcó su ausencia durante la noche del 1° de septiembre de 2022, en Recoleta. Carbone explicó que en el momento del ataque, él era el jefe del departamento de la seguridad vicepresidencial y superior de todos los custodios de Cristina Kirchner, pero sin funciones de seguridad en el terreno, sino responsable del control administrativo. “En algunas circunstancias bajaba al campo”, respondió, aunque no pudo decir con qué frecuencia lo hacía. En cambio, afirmó que su misión era de “control y fiscalización”.

Carbone también informó que lleva 35 años en la Policía Federal, 28 años en áreas de custodia y que fue parte de los equipos que protegieron a Néstor Kirchner y a Cristina Kirchner. “No hay nada que diga a dónde tengo que ir. Ningún protocolo me dice que tengo que estar las 24 horas pegado a la Presidenta”, aseguró. En esa misma línea, contó que ese día estaba en el kinesiólogo: “Tenía una lesión por un mundial de full contact en Brasil que gané, pero del que salí muy lesionado”.

Luego de la feria judicial, el primer testigo que había sido citado a declarar en el juicio fue Diego Bermúdez, secretario privado de la exvicepresidenta. “En algunas situaciones, ella (por Cristina Kirchner) tiene mucho contacto con la gente. A veces la custodia se abre y ella pide saludar, pide que la vean, hay mucha gente que la va a ver”, indicó durante la audiencia. “¿Pueden tocarla?”, le preguntó la fiscal Baigún. “Sí. Si ella quiere sí. Pueden acercarse, abrazarla, besarla”, contestó.

Bermúdez explicó que trabaja con Cristina Kirchner desde 2014, describió su tarea como secretario y su vínculo con la custodia. “Le llevo la agenda a las cuestiones que ella necesita”, dijo, en referencia a la expresidenta. “Somos –él y la custodia– el nexo entre las necesidades de ella y sus movimientos”, detalló. Y agregó: “Ella tiene custodia 24 horas, coordinamos un poco con ellos las actividad. Por ejemplo si va desde la casa al Instituto Patria, coordinamos con ellos los horarios y las salidas. Los conozco, trabajo con ellos”.

Por último, precisó que está acostumbrado a que la gente que va a verla a Cristina “siempre es gente que refleja o afecto o amor o admiración o todas cuestiones lindas y buenas. Cuando hago el paneo de esa gente [en alusión al día del atentado] me encuentro con una cara que no reflejaba nada de todo esto, era una mirada enajenada”, declaró, señalando directamente a Fernando Sabag Montiel, el hombre que gatilló su arma a centímetros de la cara de la expresidenta. “Era una mirada de odio”, planteó.

Fernando André Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo son los acusados de intentar asesinarla el 1° de septiembre de 2022 en la puerta del departamento donde vivía, en el barrio porteño de Recoleta. En tanto, Sabag Montiel ya admitió que intentó matar a la expresidenta, su exnovia se mostró errática en su declaración y Carrizo negó haber tenido alguna participación en el intento de asesinato.