En el Senado mataron el discurso "anticasta"

Es la increíble paradoja de la Argentina que diseñó el kirchnerismo: un Senado con mayoría peronista se aumentó el salario, pero la culpa es de Milei.

Análisis y opinión 21 de abril de 2024 Luis Gasulla Luis Gasulla
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Fueron todos. Esta semana el Senado de la Nación mató al discurso "anticasta" del presidente Javier Milei. El "dietazo" de los senadores terminó en 90 segundos. Unos levantaron la mano -Unión por la Patria- otros propusieron -Peronismo Federal- y otros se guardaron a silencio -La Libertad Avanza-. El PRO no acompañó pero tampoco tomó coraje para plantarse ante el arrebato de senadores que no llegan, en teoría, a fin de mes.

Tienen un promedio de 40 asesores. Obviamente, los de Unión por la Patria están primeros en el ranking. Sesionaron seis veces en doce meses pero se autoinventaron un aumentazo histórico. 

Al final, el Estado se ahorraba más plata con el 30% de aumento propuesto por la "casta" anteriormente. 

El Senado demostró que sus miembros se creen y sienten superiores al resto. Martín Lousteau lo explicó humillando a los cajeros de Banco. Hasta Lázaro Báez debe haber sentido vergüenza ajena. "Cuidado Martín, mirá a donde llegué", debe haber dicho Báez en su casona cerca de Ezeiza.

Los senadores de LLA dinamitaron el discurso de Milei. El Presidente estaba furioso. Desconoce quienes son. La lista fue un cambalache. Suelen serlo todas las listas. Rosca, contactos y financiamientos varios.

Victoria Villarruel pateó la pelota afuera. Sus explicaciones no alcanzan.

La licuación de los salarios se hace sentir. Los jubilados resisten, pero ¿con qué cara le frenarán paritarias a los sindicatos? ¿Con qué argumento se le dirá a los docentes que no hay plata? ¿Y a los enfermeros? ¿La clase media tendrá que seguir poniendo la otra mejilla? 

Algunos insensibles jugaron al 2001. Milei es consciente de lo que sucedió y buscará cambiar lo hecho en el Senado. El kirchnerismo tuvo su momento. Festejó el aumento y, con absoluto cinismo, decretó el fin del discurso anticasta de Milei. Fueron más vivos que todos. 

Si nada cambia, el voto "Tinelli" volverá al peronismo. El voto es volátil, con excepción de los extremos. Los fanáticos K lo seguirán siendo y los anti K, también. Los indignados del albertismo se pueden convertir en los enojados del presente.

Es la increíble paradoja de la Argentina que diseñó el kirchnerismo: un Senado con mayoría peronista se aumentó el salario, pero la culpa es de Milei. Insólito. 

Ocurrió por la tibieza y/o cinismo de los que entraron a la política combatiendo a la casta, se colgaron a Milei y hoy gozan de los beneficios de "la política tradicional".

Mientras tanto, se cumplen cinco meses de gobierno y los que hicieron negociados con la pobreza siguen dando cátedra de moral en televisión. 

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