Escándalo de coimas en San Lorenzo salpica al Gobierno

Filmaron al presidente del club, Marcelo Moretti, cobrando 25 mil dólares para fichar a un juvenil. En el video aparece un funcionario que fue echado por la Jefatura de Gabinete.

Política22 de abril de 2025Sección PaísSección País
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Marcelo Moretti, presidente de San Lorenzo, quedó en el centro de un escándalo tras la difusión de una cámara oculta en la que aparece recibiendo una presunta coima de 25 mil dólares para incorporar a un chico a las divisiones inferiores del club. El video, difundido por Telenueve Denuncia, lo muestra en una reunión con la madre del joven futbolista y Francisco Sánchez Gamino, entonces funcionario del Gobierno nacional.

En una primera conversación telefónica, Moretti habla de “25 mil o 30 mil dólares”. La madre del jugador le ofrece un adelanto, pero él le exige el total por adelantado. “Yo te pongo los 25.000, pero al chico fichámelo”, se lo escucha decir.

En las imágenes se ve cómo la mujer le entrega un fajo con 20 mil dólares, que Moretti guarda en su saco. En una segunda reunión, completa el monto con otros 5 mil.

Crisis en el club y coletazo en la Rosada

El caso reavivó sospechas en San Lorenzo sobre el ingreso de futbolistas sin trayectoria conocida a la Reserva desde la asunción de Moretti. La oposición interna ya anticipó que lo denunciará. Aunque el estatuto no contempla un mecanismo para remover al presidente, el escándalo generó tensión incluso dentro de su propio entorno político.

Pero el caso también impactó en la Casa Rosada. Francisco Sánchez Gamino, quien aparece en el video junto a Moretti, era director de Estudios para el Desarrollo Nacional en la Jefatura de Gabinete. Fuentes oficiales confirmaron que fue echado por orden de Guillermo Francos apenas se conocieron las imágenes.

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Sánchez Gamino reportaba al radical José Luis Vila y, según la versión oficial, el video sería anterior a su llegada al Gobierno. Sin embargo, todavía no está claro quién lo impulsó para ocupar el cargo.

En los pasillos de Boedo, algunos sostienen que la filtración fue parte de una venganza política contra Moretti, producto de negocios cruzados o promesas incumplidas. Mientras tanto, el club y el Ejecutivo intentan desactivar una bomba que estalló en simultáneo.

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