Para homenajear al Papa, el Senado vuelve a patear la discusión por Ficha Limpia

El Senado de la Nación sesionará este jueves a las 10 para rendir homenaje al papa Francisco, pero evitará nuevamente tratar uno de los proyectos más reclamados por la opinión pública: la ley de Ficha Limpia. Según pudo confirmar Sección País, el debate fue postergado para el miércoles 7 de mayo, dos semanas después, en medio de crecientes dudas sobre el compromiso real del oficialismo con la iniciativa.

La ley, que impediría ser candidatos a quienes tengan condenas por corrupción, cuenta con dictamen pero sigue trabada por las internas y la falta de decisión política. El jefe del bloque libertario, Ezequiel Atauche, pidió directamente no incluirla en la sesión de este jueves, a pesar del empuje del PRO para llevarla al recinto cuanto antes.

Entre homenajes, dilaciones y recelos

Mientras se honra la figura de Francisco en el recinto, otros temas menos incómodos avanzan. Se tratarán los pliegos de los diplomáticos Alejandro Oxenford y Wenceslao Bunge Saravia, ya con dictamen, y podrían sumarse el proyecto de emergencia para Bahía Blanca y Coronel Rosales, y la designación de Emilio Viramonte Olmos como secretario administrativo del Senado, un cargo estratégico para la vicepresidenta Victoria Villarruel.

Viramonte es un alfil de confianza de Villarruel y su desembarco consolida su poder interno en la Cámara alta. El nombramiento será clave en la reorganización del esquema administrativo del Senado, mientras se aguarda la reactivación del resto de la agenda legislativa.

La excusa santacruceña ya no corre

El argumento de la falta de votos por parte de los senadores de Santa Cruz quedó desactivado luego del video publicado por José María Carambia, en el que garantiza su respaldo a Ficha Limpia. Sin embargo, la iniciativa sigue empantanada, alimentando sospechas sobre una maniobra deliberada para enfriar el tema.

Como detalle menor pero simbólico, también se habló del reciente viaje de senadores a Roma. Ante los cuestionamientos, se resolvió que cada legislador pagará sus propios gastos, según relataron fuentes parlamentarias.

Con el tratamiento de Ficha Limpia estirado dos semanas más, el Senado vuelve a mostrar que entre gestos simbólicos y reformas reales, la balanza todavía se inclina hacia la comodidad política.