Una vecina la cruzó con ironía y cerró la escena con una cachetada simbólica. El video se viralizó y dejó en evidencia el ruido dentro del electorado amarillo.
Política06 de mayo de 2025
Sección PaísPatricia Bullrich vivió un momento incómodo en plena recorrida por la Ciudad de Buenos Aires, cuando una vecina la chicaneó y la despidió con una palmada cargada de mensaje.
“Te votamos, Pato, pero no a vos. Votamos al PRO”, le soltó la mujer, en medio de una visita a un local comercial. La escena quedó registrada en un video que ya circula por todas las redes.
Bullrich, hoy ministra de Seguridad y aliada de Javier Milei, intentó contraatacar: “¿Querés que gane Massa?”, se la escucha decir. Pero la respuesta de la comerciante se corta abruptamente con un “Mi…” antes de que el video se interrumpa.
Aunque nunca renunció al PRO, Bullrich está cada vez más metida en la campaña libertaria. En la Ciudad, trabaja para apuntalar a Manuel Adorni como candidato de La Libertad Avanza, y sus legisladores vienen bloqueando proyectos clave del jefe de Gobierno, Jorge Macri.
El cruce con la vecina expuso el ruido dentro del electorado tradicional del PRO, que no termina de digerir su pase al mileísmo. El gesto final —una cachetadita en la cara, más simbólica que violenta— coronó una escena que refleja el malestar de una parte de la tropa amarilla.
Con las elecciones porteñas cada vez más cerca, Bullrich se expone en territorio amigo pero ya no tan fiel. Y como dejó claro la mujer, el voto PRO no lo tiene garantizado.
Con apoyo de la UCR, PRO y otros bloques aliados, el oficialismo reunió 77 firmas para avanzar con la reforma del régimen penal juvenil. UP y la izquierda se opusieron.
El partido de Mauricio Macri reaccionó con dureza a la afiliación de la ministra de Seguridad a La Libertad Avanza y la acusó de traicionar a sus votantes.
Una vecina la cruzó con ironía y cerró la escena con una cachetada simbólica. El video se viralizó y dejó en evidencia el ruido dentro del electorado amarillo.
El ministro de Desregulación eliminó la exclusividad del banco público para pagar sueldos estatales, pero mantuvo intacto el negocio de los seguros de vida que maneja una aseguradora privada italiana.
El ex jefe de Gobierno porteño dijo que trajo a alguien del Conurbano que “trajo el Conurbano a la Ciudad” y aseguró que se arrepiente de esa decisión.