La novela del pacto: si no es en mayo, ¿será en junio?

Mientras el Gobierno agita la idea de un Pacto de Mayo "con la ciudadanía" y sin políticos, como consecuencia de la demora del Senado para tratar la Ley Bases, Guillermo Francos deslizó que la convocatoria podría ser reprogramada para junio. No obstante, el ministro del Interior subrayó que será el presidente Javier Milei quien tenga la última palabra al respecto.

En declaraciones televisivas, Francos reconoció que una de las fechas a elegir en caso de que Milei se incline por la postergación de la firma del pacto podría ser "el 20 de junio en Rosario, en el Monumento a la Bandera".

"Tiene un efecto simbólico importante, porque la bandera nos une a todos. Es algo que el Presidente tiene que decidir", completó el ministro del Interior.

En este sentido, un importante colaborador del Presidente reconoció off the record que "el Gobierno no está casado con una fecha" y aclaró que "tampoco debe ser una fecha patria". "Ponemos la fecha nosotros y la transformamos en patria", señaló.

Sin embargo, dentro del círculo presidencial no hay consenso respecto a cómo salir del brete en el que el propio Gobierno se metió al atar la convocatoria a la suerte de la Ley Bases. Por caso, el ala dura del mileísmo propone como alternativa mantener la fecha del 25 de mayo pero reformular el acto, excluyendo a la clase política y hablando de cara a la ciudadanía. Algo similar a lo ya realizado tras la jura de Milei.

Como sea, a casi una semana de la fecha originalmente pautada, la organización es incipiente, y si bien se avanza en la coordinación estructural, con la idea de replicar lo que en Casa Rosada definieron como “un esquema imperialista” desde lo estético, y con la posibilidad de montar una puesta en escena con columnas romanas, aún falta definir detalles como el escenario (interior o exterior) del Palacio de Justicia de la ciudad de Córdoba.