Alerta en la Rosada: el Gobierno analiza vetar el Presupuesto tras la caída del capítulo clave para el déficit cero

El Ejecutivo considera que el proyecto aprobado en Diputados "no sirve" porque mantiene gastos obligatorios en Discapacidad y Universidades. Apuntan a la "traición" de cinco gobernadores.

Política18 de diciembre de 2025Sección PaísSección País
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La euforia por la primera media sanción de un Presupuesto propio duró poco en los pasillos de la Casa Rosada. A pesar de haber conseguido 132 votos en la votación general durante la madrugada de este jueves, en el Gobierno domina la preocupación y el enojo: la caída del Capítulo XI —rechazado por 123 votos contra 117— dejó al proyecto "vacío" de su herramienta principal para garantizar el equilibrio fiscal. Ante este escenario, la administración de Javier Milei evalúa seriamente demorar el envío del texto al Senado o incluso vetar la ley si se sanciona tal cual salió de la Cámara baja.

Para el equipo económico, la eliminación de ese apartado, que proponía la derogación de las leyes de Emergencia en Discapacidad y de Financiamiento Universitario, representa un golpe letal a la hoja de ruta libertaria. "Vulnera el déficit cero que justamente queríamos construir con este Presupuesto", sentenció una fuente inobjetable del Poder Ejecutivo en diálogo con Infobae. El cálculo oficial es alarmante: aseguran que "solo Discapacidad son 5 puntos del PIB", una carga de gasto que consideran impagable sin financiamiento genuino.

La lectura política que hacen en Balcarce 50 es que la oposición, al voltear el artículo 75, busca forzar al Presidente a administrar un presupuesto sin superávit primario, algo que el Gobierno define como "inaceptable". Hasta ahora, el Ejecutivo no giraba esos fondos amparándose en la falta de presupuesto asignado, pero reconocen que "si se aprueba la ley, ya no hay excusas".

Plan Veto o la vuelta al "Excel"

Ante la certeza de que el proyecto actual no le sirve para cumplir el mandato electoral, el oficialismo diseña una nueva estrategia legislativa. Una opción es "dormir" el proyecto en el tránsito hacia la Cámara alta, esperando a que primero se trate la Modernización Laboral. La otra, más drástica pero que gana fuerza por estas horas, es el veto total.

Paradójicamente, la oposición tiene incentivos para aprobar la ley tal como está, lo que obligaría al Gobierno a pagar. Si esto ocurre, en la Rosada admiten que preferirían volver al esquema de reconducción presupuestaria —sería la tercera vez consecutiva— para que el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, recupere el manejo discrecional de los fondos. "Va a tener que seguir armando el Excel", bromeaban con ironía en el oficialismo tras la sesión.

La lista de los "traidores"

La bronca del Gobierno tiene destinatarios con nombre y apellido: los gobernadores. Los estrategas de La Libertad Avanza contaban con que la votación por capítulos (y no por artículos) forzaría a los mandatarios a apoyar el paquete completo, pero el plan falló.

En la lista negra del oficialismo quedaron anotados Raúl Jalil (Catamarca), Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Gustavo Sáenz (Salta). A pesar de haber recibido importantes transferencias de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) en las horas previas, sus diputados votaron en contra del capítulo fiscal.

Sin embargo, la mayor sorpresa y decepción provino de los aliados. El Gobierno no esperaba que Rolando Figueroa (Neuquén) y Leandro Zdero (Chaco) giraran sus votos a último momento. El chaqueño había sido socio electoral en octubre, mientras que el patagónico mantenía una relación cordial. A ellos se sumó la abstención de Darío Schneider, un diputado entrerriano que ingresó en la boleta libertaria gracias al acuerdo con Rogelio Frigerio, lo que terminó de dinamitar la confianza con las provincias dialoguistas.

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